La Mujer Sin Nombre es una novela escrita por Vanessa Montfort y publicada por Plaza & Janes Editores. La historia se centra en la vida de María Lejárraga, una mujer silenciada por la historia oficial que fue la autora en la sombra de algunas de las obras más importantes del siglo XX.
La trama comienza cuando la directora teatral Noelia Cid recibe el encargo de estrenar la obra perdida del reconocido dramaturgo Gregorio Martínez Sierra, llamada «Sortilegio». Para informarse sobre la obra, Noelia decide investigar a través de los documentos que María Lejárraga, la esposa de Martínez Sierra, conservaba.
Durante su investigación, Noelia se adentra en la compleja relación amorosa entre María y Gregorio, pero también descubre un misterio que lleva sin resolverse más de un siglo. A medida que profundiza en la vida de María, Noelia se sumerge en una historia llena de pasión, arte y feminismo. María luchó contra viento y marea por ejercer su vocación y vivió en primera línea los grandes acontecimientos del siglo pasado, desde el Madrid literario de los años veinte hasta el París de la Belle Époque, pasando por la lucha política de las mujeres durante la Segunda República, el exilio tras la Guerra Civil, la ocupación de Francia por los nazis y el glamour de la época dorada de Hollywood.
Además, a lo largo de la novela, se exploran las relaciones de María Lejárraga con grandes personalidades de la época, como Juan Ramón Jiménez, Manuel de Falla y Federico García Lorca, entre otros.
«La Mujer Sin Nombre» es una novela apasionada y maravillosa que toma una figura casi desconocida de la historia cultural para darle protagonismo y explorar su vida y su legado. La autora, Vanessa Montfort, logra transportar al lector a diferentes épocas y lugares históricos, y ofrece una versión humana y cercana de los personajes famosos que rodeaban a María Lejárraga.
En mi opinión, «La Mujer Sin Nombre» es una novela muy interesante que rescata del olvido a una figura importante de la literatura y el feminismo. La trama está bien desarrollada y la ambientación histórica es muy lograda. Los personajes tienen profundidad y se sienten reales, lo que ayuda a que el lector se involucre en la historia. Recomiendo esta novela a aquellos que disfrutan de las historias basadas en hechos reales y que quieran conocer más sobre la vida de mujeres destacadas en la historia.