El libro «La Soledad del Corredor de Fondo» escrito por Alan Sillitoe y publicado por El Tercer Nombre es una novela que fue galardonada con el premio Hawthornden en 1959. Más tarde, fue adaptada al cine por Tony Richardson. Este inquietante y tierno relato no dejará indiferente a nadie.
La novela se compone de una serie de relatos, siendo el primero de ellos el que da título al libro. Este relato narra la historia de Colin Smith, un joven que ingresa en un reformatorio donde se intenta integrar a los chicos a través del deporte. Colin destaca como corredor de fondo y cada mañana se le permite salir a correr para entrenar de cara a la Copa con Cinta Azul de Carreras de Fondo de los reformatorios de toda Inglaterra. El gobernador del reformatorio ansía ganar este trofeo a toda costa, pero Colin no está dispuesto a ganarlo para él. Durante sus solitarias carreras, Colin repasa su vida anterior y comienza a reflexionar sobre su situación actual, llegando a considerar que puede que su situación en el reformatorio sea privilegiada.
Los restantes relatos de la novela narran historias de personajes rebeldes nacidos en los barrios obreros y marginales de la Inglaterra de posguerra. Estos personajes rechazan su integración en el escenario social en el que les ha tocado vivir.
En mi opinión, «La Soledad del Corredor de Fondo» es una novela que aborda temas como la rebeldía, la marginalidad y la búsqueda de identidad en un contexto social difícil. Alan Sillitoe logra transmitir de manera magistral los sentimientos y pensamientos de sus personajes, provocando una profunda reflexión en el lector. La narrativa es ágil y cautivadora, manteniendo el interés a lo largo de la historia.
Recomendaría este libro a aquellos lectores que disfruten de obras literarias que exploran la condición humana y reflexionan sobre la sociedad y el individualismo. «La Soledad del Corredor de Fondo» es una obra que invita a la reflexión y que deja una huella duradera en el lector.